En este apartado se estudian los marcadores discursivos, es decir, las palabras explicitas que nos permiten llevar a cabo argumentaciones. Pondré especial enfasis en las particulas inferenciales, es decir, aquellos marcadores discursivos que indican relaciones de consecuencia. Estas particulas inferenciales no son absolutamente intercambiables y tienen ciertas sutilezas entre sí. Analizando estas sutilezas aprenderemos a distinguir cuatro tipos de relaciones de consecuencia: condiciones (suficientes y/o necesarias), relaciones de contigüidad, causas y motivos. Al mismo tiempo estudiaremos esto dentro de un cotexto discursivo mayor, proponiendo el modelo CRI que distinguirá entre cuatro tipos de marcadores discursivos conforme a las diferentes funciones: (1) Estructurar información, (2) transmitir nuestra actitudes a traves de afirmaciones, (3) exponer con precisión nuestras relaciones de consecuencia y (4) crear argumentos coorientadas o contraorientados en nuestro discurso.
En este apartado aprenderemos a evaluar éticamente los argumentos. Habitualmente se evalua  si un argumento es valido o invalido, es decir, si su conclusión se sigue o no de las premisas. Sin embargo, existen argumentos válidos no virtuosos. Por lo tanto, cabe evaluar los argumentos dentro de un marco más amplio. Para este propósito, estudiaremos los agentes argumentativos, es decir, las personas que argumentan (y no simplemente sus argumentos). En primer lugar,  evaluaremos los  tipos de personalidades de los agentes argumentativos: (1) aquellos que te fuerzan a asentir, (2) aquellos que pretenden seducir para que lo hagas y (3) aquellos agentes éticos que buscan la verdad, es decir, aquellos que están dispuestos a cambiar de opinión y, al mismo tiempo, se niegan a exponer sus argumentos de manera engañosa. En segundo lugar, expondremos las diferentes virtudes argumentales de los agentes argumentativos: Buena voluntad, civismo y respeto, imparcialidad, caridad, humildad y falibilismo, coraje y valor, coalescencia, autenticidad, honestidad y sinceridad, empatía, cosmopolitismo y pluralismo.